EL BUEN TRATO INFANTIL

De la conferencia del neurosiquiatra Dr. Jorge Barudy "LOS BUENOS TRATOS Y LA RESILIENCIA INFANTIL EN LA PREVENCIÓN DE LOS TRASTORNOS DEL COMPORTAMIENTO”

"Niño en brazos". Escultura de María Elisa Ruiz-Tagle.


"Diferentes investigaciones realizadas en el campo de la neurología, la etología humana y las neurociencias entregan la información necesaria para que no quede ninguna duda que la maduración del cerebro y del sistema nervioso de los infantes, depende del cariño, la estimulación y los cuidados que reciben del mundo adulto, en especial de sus madres y padres. Cuando esto no ocurre existe un enorme riesgo de daños de las diferentes funciones mentales necesarias para asegurar el aprendizaje, una adaptación sana al entorno y la participación en relaciones interpersonales afectivas basadas en el respeto y la reciprocidad en la producción de cuidados. Por esta razón, insistiremos que los buenos tratos, sobre todo, antes de los tres años de edad, son fundamentales para promover una infancia y una adolescencia sana , así como una adultez constructiva y altruista. "


El modelo de buenos tratos que queremos presentar en esta conferencia coloca en el centro de las prioridades de los adultos, el bienestar y la salud de todos los niños, las niñas y los adolescentes, particularmente aquellos cuyos derechos han sido o son vulnerados.Uno de los derechos fundamentales de los niños, las niñas y los jóvenes es que sus necesidades sean satisfechas para desarrollarse y alcanzar la madurez. Esto es una tarea no sólo de sus padres y cuidadores, sino del conjunto de la sociedad.

En este sentido nos parece importante insistir que es responsabilidad de cada adulto, cada comunidad y cada Estado, crear las condiciones para que todos los niños y niñas tengan acceso a los cuidados, la protección y la educación que necesitan para llegar a la adolescencia y luego integrar la vida adulta, de una forma sana, constructiva y feliz. Esto es una garantía para que todos los niños lleguen a ser ciudadanos y ciudadanas adultas, poseedores de una postura ética y de los comportamientos altruistas necesarios para establecer relaciones conyugales, parentales, familiares y sociales basadas en modelos de buenos tratos hacia sí mismos y hacia los demás.

Por ello, nos parece relevante insistir en la relación existente entre trastornos del desarrollo, comportamientos agresivos y violentos, así como otras manifestaciones de sufrimiento infantil y juvenil, con el hecho que un número significativo de niños y adolescentes son víctimas de violencia tanto en el ámbito familiar, como en el ámbito institucional y social.

En relación a esto último, nuestra percepción es que el mundo económico, social, cultural y político que los adultos están ofreciendo en la actualidad a la infancia y a la juventud, contiene una cantidad significativa de factores que favorecen esta violencia.

En esta perspectiva la prevención de los malos tratos infantiles y sus consecuencias, tiene queanclarse en la promoción de dinámicas de cuidado y buen trato de todos los niños y niñas en todos los ámbitos de la sociedad. Esto será posible sólo si los adultos son capaces de asociarse constructivamente para lograr una sociedad justa, solidaria y sin violencia.

En el marco de esta conferencia, trataremos de demostrar que la violencia y los trastornos delcomportamiento de los menores, está en estrecha relación con el hecho que sus familias, las instituciones y la sociedad, por su funcionamiento, no han podido de una forma suficientemente adecuada, asegurarles una infancia caracterizada por un clima afectivo y un contexto educativo basado en los buenos tratos y en el desarrollo de la resiliencia.

Nuestro concepto de buen trato se basa en la idea que la capacidad de tratar bien a las crías esuna capacidad inherente a las posibilidades biológicas de los seres humanos. Nuestra estructura biológica permite el carácter social y altruista de nuestros comportamientos por las hormonas que produce, entre otras: la oxitocina, la vasopresina y las endorfinas. En ese sentido, cuidar de los niños y niñas ofreciéndoles contextos de buenos tratos es un fenómeno posible y al alcance de cualquier comunidad humana.

En el marco de esta conferencia, queremos aportar nuestro modelo para explicar los procesos bio-psico-sociales a través de los cuales emergen los “buenos tratos infantiles”, y la relación que estos tienen con una infancia y una adolescencia sana, constructiva, feliz y resiliente.

Diferentes investigaciones realizadas en el campo de la neurología, la etología humana y las neurociencias entregan la información necesaria, para que no quede ninguna duda que la maduración del cerebro y del sistema nervioso de los infantes, depende del cariño, la estimulación y los cuidados que reciben del mundo adulto, en especial de sus madres y padres. Cuando esto no ocurre existe un enorme riesgo de daños de las diferentes funciones mentales necesarias para asegurar el aprendizaje, una adaptación sana al entorno y la participación en relaciones interpersonales afectivas basadas en el respeto y la reciprocidad en la producción de cuidados. Por esta razón, insistiremos que los buenos tratos, sobre todo, antes de los tres años de edad, son fundamentales para promover una infancia y una adolescencia sana , así como una adultez, constructiva y altruista.

A diferencia de las dinámicas sociofamiliares que producen malos tratos, las dinámicas de buen trato no producen sufrimiento, ni vulneración de derechos y daños a los niños ni a los jóvenes, sino al contrario, bienestar, salud, así como recursos resilientes. También compartiremos con los y las participantes, el resultado de investigaciones científicas relevantes, así como nuestro material clínico, que nos permiten afirmar que los buenos tratos durante la infancia es uno de los principales factores para promover una buena salud mental y física en la adolescencia y mas tarde en la vida adulta.

Los buenos tratos infantiles como una producción social

En el marco de esta conferencia presentaremos los factores fundamentales que según nuestro modelo participan en la producción de un contexto de buenos tratos para los niños, niñas y adolescentes. El bienestar infantil basado en una filosofía de derechos y obligaciones, es el resultado de un proceso complejo, basado en una práctica de buenos tratos (B.T.) en la cual interactúan los diferentes niveles representados en la ecuación presentada en el esquema siguiente:

El proceso de los buenos tratos infanto-juveniles

Recursos comunitarios Competencias parentales
B.I. = B.T = --------------------- Resiliencia
Factores contextuales Necesidades infantiles

A través de esta ecuación, intentamos mostrar que el bienestar infanto-juvenil, es el resultado de un proceso, que es más que la suma de los aportes y las responsabilidades individuales de los padres y de los miembros de una familia. El bienestar infantil es también y sobre todo la consecuencia de los esfuerzos y recursos coordinados que una comunidad pone al servicio del desarrollo integral de todos sus niños y niñas.

Con esta fórmula presentamos los diferentes componentes de este proceso, y nos sirve para mostrar que el desarrollo sano de los menores, es la consecuencia del predominio de experiencias de buenos tratos que han conocido en sus vidas. Estos buenos tratos no sólo corresponden a lo que los padres son capaces de ofrecer, sino también son el resultado de los recursos que una comunidad pone a su servicio para garantizar la satisfacción de las necesidades infantiles y el respeto de sus derechos, así como promover, apoyar y rehabilitar las funciones parentales.

Artículo completo disponible en http://www.addima.org/Documentos/LOS%20BUENOS%20TRATOS%20Y%20LA%20RESILIENCIA%20INFANTIL%20EN%20LA%20PREVENCI%C3%93N%20DE%20LOS%20TRASTORNOS.pdf